Zeus y el Oráculo de Dodona
Estaba consagrado a Zeus y en el se practicaba la adivinación, en el centro del santuario se hallaba el árbol sagrado: la encina y desde el cual el dios comunicaba su voluntad a los sacerdotes.
La gran encina de Zeus, hacía las veces de palomar y las señales que las peléades que eran 3: Promenia, Timárete y Nicandra y que eran las sacerdotisas debían interpretar, venían del grito de las palomas, el rumor de las hojas de la encina y los ecos sonoros que el viento conseguía al hacer golpear unas cadenas emplazadas allí sobre unos calderos.
La gran encina de Zeus, hacía las veces de palomar y las señales que las peléades que eran 3: Promenia, Timárete y Nicandra y que eran las sacerdotisas debían interpretar, venían del grito de las palomas, el rumor de las hojas de la encina y los ecos sonoros que el viento conseguía al hacer golpear unas cadenas emplazadas allí sobre unos calderos.
Homero menciona al Oráculo de Dodona y comentó que los sacerdotes de Dodona a quienes llamó Selloi nunca se lavaban los pies y dormían en el suelo apesar del frío invierno de la zona.
Filostrato menciona que cada sacerdote estaba destinado y especializado para realizar diferentes tareas:
- "Zeus se complace con ellos porque son sacerdotes y se complacen en ello, comen los que hay, uno ofrece las oraciones, otro recoge la cebada, otro despelleja el animal sacrificado y asi y sucesivamente"
Aristótoles opinaba que Él Epiro era la zona del posible origen de los helenos.
Cuenta una leyenda que una paloma llegó volando desde Tebas, Egipto y se posó sobre una encina, era una señal de que allí debía de edificarse el santuario consagrado a Zeus y aquella encina pasó a ser el ente mediador entre el dios, padre de todos los dioses y los sacerdotisas que interpretaban los anuncios del inmortal dios del Olimpo.
Como era el dios mas importante del Olimpo griego, al Oráculo de Dodona llegaban los peregrinos desde los confines de la Grecia antigua para consultar sobre los temas que mas les afligian y espraban que las respuestas fueran alagüeñas.
El Santuario de Dodona fue destruido por los etolios en el año 218 a. de C.
Durante un buen tiempo fue superado en importancia por el Santuario de Delfos donde se veneraba a Apolo, dios del amor.
En las cercanías del Santuario de Dodona se encuentra el Teatro de Dodona, construído durante el reinado de Pirro (318 - 272 a. de C.) de forma semicircular y con capacidad para 18,000 personas debidamente sentados.
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